Hasta luego, Fernando.

domingo 31 de mayo de 2009
Hasta luego, Fernando, por Cristina Francés

Queridos amigos, no sé porqué motivos, éste mes de mayo me retrasé en escribir el artículo para la Editorial del Boletín. Ahora ya lo sé. Tenia que rendirle un homenaje desde éste pequeño rincón del boletín a una gran persona, amigo y mejor pintor: D.Fernando Soria.
Recuerdo, cuando en mi exposición individual de la Casa de Cultura de Campello, en el 2000, nerviosa, expectativa, esperando recibir compañeros de la Asociación....cuando ví aparecer a D. Fernando, me dió una gran lección de humanidad, acercamiento y amistad que ha durado siempre. Él, que era, y és un gran creador, un genio, se dignó a visitar mi exposición, yo, una novata, que como quien dice, empezaba a caminar en el mundo del arte. Puedo decir que he tenido el lujo de conocer a D. Fernando, de tener siempre su apoyo y su amistad.
De su pintura, que puedo deciros, que ya no sepais. Su pincelada es suelta, pero firme, la luz de sus playas, el cromatismo que sólo él sabía plasmar en sus lienzos. Su pintura es impactante, con una libertad de expresión magnífica. Sólo cambia su cromatismo,cuando la desgracia llega a su vida con la muerte de su querida hija Beatriz en el 83. Éste hecho, transforma a D. Fernando y no puede volver a pintar con el cromatismo de antes, pasa de un Impresionismo a una Abstracción en blanco y negro. En los años 80,para D. Fernando, todo se vuelve negro, gris, opaco, sin luz. Los colores son negros, grises, blancos cerúleos, ocres oscuros, tierras sucios, rojos casi negros...Ya en su última época aparecen colores con más fuerza y color, como el amarillo, azul y verde. Para mí, D. Fernando era realista, pues se inspiraba en "escenas de la vida cotidiana", escenas de la calle, de la playa, del amor... Aparecen temas intrínsicamente unidos como la vida y la muerte en su obra. Sus naturalezas muertas, sus floreros, sus muebles retorcidos,mostrándose misteriosos...definen a D. Fernando Soria.
Todos los que le hemos conocido y disfrutado de su amistad, hemos sido privilegiados y "tocados" por su arte y su razón.
GRACIAS Y HASTA LUEGO, FERNANDO